Más de 3.700 alumnos con discapacidad logran inclusión laboral gracias al talento digital

La inclusión laboral de las personas con discapacidad sigue siendo uno de los grandes retos sociales y económicos en España. Sin embargo, iniciativas como el programa Por Talento Digital, impulsado por Fundación ONCE con el apoyo de la Comisión Europea y el Fondo Social Europeo, están demostrando que la tecnología puede ser una poderosa herramienta para la igualdad de oportunidades. En 2025, más de 3.700 alumnos con discapacidad han conseguido acceder al mercado laboral gracias a la formación en competencias digitales, y se espera cerrar el año con 5.600 beneficiarios, de los cuales el 48% serán mujeres.

Un programa que transforma vidas

Por Talento Digital nació en 2021 como respuesta a dos desafíos: la creciente demanda de profesionales en el sector tecnológico y la necesidad de garantizar la inclusión de colectivos vulnerables en un mercado laboral cada vez más digitalizado. Desde entonces, se ha convertido en una referencia en formación inclusiva, ofreciendo itinerarios que van desde competencias digitales básicas hasta especializaciones avanzadas.

Entre las áreas más demandadas destacan:

• Programación en JAVA, una de las tecnologías más utilizadas en desarrollo de software.
• Edición y postproducción audiovisual, que abre oportunidades en sectores creativos y de comunicación.
• Ciberseguridad, un ámbito crítico en la economía digital.
• Inteligencia Artificial, que se posiciona como la competencia del futuro.

Además, el programa incluye una línea de becas para cursar másteres y formaciones de alto valor añadido, lo que permite a los participantes acceder a empleos cualificados y bien remunerados.

Impacto real en la empleabilidad

Uno de los indicadores más relevantes del éxito de Por Talento Digital es que el 10% de los alumnos consigue un contrato estable y de calidad en el ámbito digital en el año posterior a finalizar la formación. Este dato refleja que la capacitación tecnológica no solo mejora la empleabilidad, sino que también contribuye a la estabilidad laboral, un aspecto clave para la autonomía y la inclusión social de las personas con discapacidad.

Desde su creación, el programa ha beneficiado a casi 30.000 personas con discapacidad, consolidándose como una de las iniciativas más ambiciosas en Europa para reducir la brecha digital y laboral. Este esfuerzo se enmarca en una estrategia más amplia de Fundación ONCE, que desde el año 2000 ha gestionado más de 1.000 millones de euros del Fondo Social Europeo, orientando laboralmente a unas 700.000 personas y ayudando a 350.000 a conseguir empleo.

El papel de los fondos europeos en la cohesión social

La directora de la Oficina de Asuntos Europeos del Grupo Social ONCE, Cristina Barreto Zurrón, ha subrayado la importancia de los fondos europeos como pilar fundamental para la cohesión social. Gracias a esta financiación, se han multiplicado las oportunidades laborales para las personas con discapacidad, especialmente en ámbitos digitales, donde se juega el futuro del empleo. Este compromiso refleja la visión de la Unión Europea de convertir los principios de igualdad en acciones concretas que mejoran la vida de los colectivos más vulnerables.

Tecnología e inclusión: una alianza estratégica

La digitalización no solo está transformando la economía, sino también la forma en que concebimos la inclusión. La tecnología, bien utilizada, puede ser un catalizador para derribar barreras y generar oportunidades. Programas como Por Talento Digital demuestran que la formación en competencias digitales es la llave para acceder a empleos de calidad y para participar activamente en la sociedad del conocimiento.

Además, la apuesta por la diversidad en el sector tecnológico no es solo una cuestión ética, sino también estratégica. Las empresas que integran talento diverso son más innovadoras y resilientes, lo que les permite adaptarse mejor a los cambios del mercado.

Retos y oportunidades para el futuro

Aunque los avances son significativos, el camino hacia la plena inclusión laboral aún presenta desafíos. Es necesario seguir ampliando la oferta formativa, adaptándola a las nuevas tendencias tecnológicas, como la inteligencia artificial generativa, la computación en la nube y la analítica de datos. También se debe reforzar la colaboración entre empresas, administraciones y entidades sociales para garantizar que la formación se traduzca en empleo real.

Otro reto clave es la brecha de género. Aunque el 48% de los participantes en Por Talento Digital son mujeres, todavía existe una infrarrepresentación femenina en áreas tecnológicas avanzadas. Promover la participación de mujeres con discapacidad en estos sectores es esencial para construir un mercado laboral más equitativo.

Conclusión: inclusión y tecnología, una fórmula ganadora

El éxito de Por Talento Digital confirma que la inclusión laboral en la era digital es posible cuando se combinan formación, recursos y compromiso social. Más de 3.700 personas con discapacidad han encontrado una oportunidad para desarrollar su talento y construir un futuro profesional en el sector tecnológico. Este logro no solo beneficia a los individuos, sino que también fortalece la economía y la cohesión social.

La digitalización seguirá marcando el rumbo del empleo en los próximos años. Asegurar que nadie quede atrás es una responsabilidad compartida que exige visión, inversión y colaboración. Porque en la sociedad del conocimiento, el verdadero progreso se mide por la capacidad de integrar a todos en el camino hacia el futuro.